Un hombre de 41 años que cumplía prisión domiciliaria en la casa de su expareja fue trasladado a la cárcel luego de ser denunciado por ejercer violencia verbal y psicológica. La decisión judicial se tomó tras una audiencia de juicio abreviado en la que el acusado confesó los hechos.

La fiscal penal de Violencia Familiar y de Género 2, Mónica Viazzi, representó al Ministerio Público Fiscal en el proceso llevado ante el Juzgado de Garantías 4. Según la denuncia, el hombre —condenado por una causa de narcotráfico en 2024— había asumido una conducta agresiva desde que cumplía arresto en el hogar que compartía con su expareja y madre de sus tres hijos.

El episodio decisivo ocurrió el 23 de agosto, cuando el sujeto destruyó el celular de la mujer y más tarde la agredió verbalmente. La madre de la víctima intervino y llamó al 911. La mujer solicitó que se le retirara del domicilio, medida que fue aceptada por el juez Diego Rodríguez Pipino.

El magistrado unificó la condena del acusado y le impuso una pena de 4 años y 6 meses de prisión efectiva por daños simples y calificados, declarándolo reincidente por primera vez. Además, quedó inhabilitado para ejercer cargos públicos o conducir vehículos. Fue trasladado de inmediato a la Unidad Carcelaria N° 1 de Villa Las Rosas.